Cuando se trata de explorar el cautivador y apasionante mundo del vino, hay una figura imprescindible, que en ocasiones se denomina “el artista del vino”: el enólogo. Su experiencia y vocación es crucial para crear vinos con personalidad y calidad, que deleiten los sentidos de aquellos que lo prueban.
Condes de Albarei está formado por un gran equipo de profesionales que trabajan en las distintas etapas de elaboración y comercialización del vino. Nuestro equipo de enología forma parte de ese proceso tan importante, que da lugar a nuestros albariños con Denominación de Origen Rías Baixas. Por ello, en este artículo hablaremos del rol del enólogo en la elaboración del vino y de cómo su experiencia puede influir en el sabor y aroma final de nuestros albariños.
En primer lugar, es necesario conocer la definición de este profesional del mundo del vino: se dice que el enólogo es el experto que se encarga de supervisar todo el proceso de elaboración del vino, desde la selección de las uvas, hasta el embotellado final. Su gran conocimiento sobre viticultura y enología y su bagaje profesional le permiten tomar decisiones importantes en el proceso de elaboración, para así conseguir vinos únicos.
- Primera fase: el enólogo en el viñedo
- Segunda fase: el enólogo en la bodega
- Tercera fase: en la cata
- Nuestro equipo de enología
Primera fase: el enólogo en el viñedo
El papel del enólogo comienza en los viñedos, en los que se encarga, junto con el equipo de campo, de seleccionar las mejores cepas para cultivar la variedad de uva pertinente y supervisar su cuidado y crecimiento. Además, también debe prestar especial atención a factores como la madurez, el equilibrio de azúcares y la acidez de la uva. De esta forma, puede deducir la calidad de la añada, así como los tiempos de duración de las etapas del ciclo de vida de la vid. Es decir, puede deducir cuándo será la mejor fecha para proceder a la recogida del fruto: la vendimia. Estas decisiones afectan directamente al aroma y sabor de nuestros vinos. Su papel en este primer momento es buscar la excelencia de nuestra materia prima: la uva albariño.
Segunda fase: el enólogo en la bodega
En dicha etapa, la vendimia ya tuvo lugar y comienza el proceso de elaboración de nuestros albariños. En este momento el rol de enólogo es determinante, ya que la fermentación y crianza son procesos de gran importancia dentro de la producción del vino, que influyen decisivamente en sus características organolépticas.
De este modo, el enólogo aplica sus conocimientos y experiencia y controla aspectos como la temperatura, la duración de los procesos o la acidez, hasta obtener el perfil deseado. Del mismo modo, el “artista del vino” decide el tipo de crianza; por ejemplo, en barricas de roble, como nuestro Carballo Galego, o en depósitos de acero inoxidable, como nuestro Condes de Albarei o Enxebre. Estas elecciones tendrán un impacto en el resultado final: el vino embotellado.
Tercera fase: en la cata
Además de formar parte del proceso de elaboración y de tomar decisiones cruciales, el enólogo también es experto en catar y degustar vinos. De hecho, realiza catas constantes del vino para estudiar su progreso y determinar cuál es el equilibrio perfecto para esa variedad y esa bodega. Asimismo, tiene la difícil labor de encontrar la armonía entre la innovación y originalidad de las nuevas técnicas de elaboración, con la tradición y esencia de la viticultura. En este sentido, es importante que estén al día de las nuevas tendencias en el mundo del vino, para ofrecer a los consumidores lo que demandan en cada momento, pero sin perder de vista el origen y fundamentos de la producción vinícola de calidad.
Nuestro equipo de enología
En definitiva, el papel de este perfil profesional se refleja en cada botella. En el caso de nuestros albariños de Condes de Albarei, son nuestros enólogos, Andrea Obenza y José Hidalgo. Su gran conocimiento de la variedad albariño, su experiencia profesional en el mundo de la enología (y del vino en general) y sus vivencias profesionales y personales rodeada de los viñedos del Valle del Salnés desembocan en la creación de nuestros vinos, de una calidad excepcional, reconocida a nivel nacional e internacional.